Proyectando un "gastro-bar". Primera parte
Se trata de un establecimiento diseñado para realizar venta de determinados productos alimentarios y a la vez ofrecer degustaciones de los mismos o bien elaboraciones propias. Estas elaboraciones, ya bien sea en forma de tapas, pinchos o raciones serán mas actuales, modernas y creativas en cuanto presentación y contenido se refiere. Cocina de fusión a precios reducidos. Servicio mas profesionalizado en un ambiente cálido e informal.
Para desarrollar este negocio, en coherencia con la inversión, gasto y productividad contemplado en el estudio, estimamos que el espacio necesario para llevarlo a cabo, no debería ser superior a 35 m2 ni tampoco inferior a 20m2.. Siempre contando con la posibilidad de la instalación de una terraza para 3 a 4 mesas. La capacidad de ubicarlo en el lugar óptimo para realizar con éxito ambas funciones, bar y tienda, ha de ser prioritario y esencial.
1) Plan seguir.
Con la cautela de correr el menor riesgo posible, el camino a seguir desde su inicio o puesta en marcha, hasta lo que consideramos completar el escenario deseado, su recorrido ha de ser de manera gradual. Asegurando cada paso hacia nuevas y pequeñas inversiones. Comenzar con una apertura básica pero sólida en maquinaria de cocina e ir incrementando los productos ofertados en la carta etc, en función del crecimiento y por tanto de la demanda.
a) En una primera etapa se trataría de minimizar, en la manera de lo posible, la carta de salida optimizando las elaboraciones propias con los productos de 5ª gama. Estudiar con precisión la caducidad de los productos perecederos y su aceptación y demanda: embutidos, conservas de alta calidad, etc. Esto nos permitirá hacer poca inversión en maquinaria de cocina y gastos de personal. En la tienda la venta se reduciría a aceite de oliva virgen extra, vinos con D.O. y alguna delicatessen perecedera a largo plazo.
b) En la medida que el negocio fuera consolidándose, habituándonos a su aprendizaje y funcionalidad, aumentaríamos la gama de elaboraciones y productos para llevar.
c) Si la experiencia y el tiempo nos indican que vamos por el buen camino, reflejado en beneficios, es el momento de invertir en nueva maquinaria de cocina con nuevas técnicas de restauración. Entre ellas la más importante en rentabilidad y calidad es la conservación y cocción al vacío, usada por los mejores chef del momento en los más famosos restaurantes.
2) Bar y tapas creativas. Gastrobar.
El aspecto de un gastrobar se distingue de un bar tradicional en el espacio que lo ocupa . En su atmósfera se ha de percibir sosiego, profesionalidad, pulcritud y ha de ser acogedor. La decoración y el ambiente ha de resaltar el buen gusto dentro de lo informal, lo práctico y lo sencillo. Música suave, envolvente: jazz, blues, chill out,.. . El gusto por la buena cocina y la vocación por el vino han de ser percibidos de manera objetiva.
La carta del restaurante no ha de ser extensa, pero si completa. Ésta es la mentalidad que se requiere si se desea ser atractivo, no sólo de cara al consumidor general, sino también a la opinión de los críticos más exigentes.
En la cocina, cada plato tendrá su ficha técnica, reflejando: producto, cantidad y precio mercado. Contemplando el escandallo y tiempo de elaboración y así obtener el coste de cada plato y determinar el precio final.
Una vez obtenido el precio al cliente, se contrastarán con los existentes en el de mercado, obviamente en condiciones similares, y así deducir nuestra competitividad.
3) Tienda
- Expositores con los productos a la venta, elaboraciones propias, productos canarios y del resto del país.
- Vinos con D.O.
- Aceite de oliva extra virgen.
- Cerveza de importación.
- Alguna delicatessen
4) Cócteles y música.
Para atraer mercado en la tarde-noche y aportar rentabilizar a la inversión en el negocio, tenemos presente la opción de ofrecer un servicio de coctelería ambientado con música y algunas noches actuaciones en directo. Siempre dentro de la reglamentación municipal vigente en lo referente a actividades y horarios.